Existen dos ciudades con este mismo nombre, Friburgo de Brisgovia, en Alemania, (Selva Negra) y Friburgo (Fribourg) en Suiza. Pero no te confundas! aquí hablaremos de Suiza. Cuando dije que viajaba a Friburgo la gente relacionaba este nombre con la ciudad alemana, la cual es más popular a nivel turístico. Sin embargo esta ciudad tiene mucho que ofrecer y merece una visita. Si tienes pensado incluirla en el itinerario de tu próximo viaje, seguro no te arrepentirás!.

Estaba viajando por Suiza cuando decidí hacer una parada en esta ciudad. Se encuentra entre Lausana y Berna. Es la capital de Suiza Oriental y su nombre significa «Ciudad libre» proviene del alemán Frei=libre y Burg=ciudad. En Friburgo se habla francés y alemán, es una de las tres ciudades bilingües de Suiza.
Fue fundada sobre terrazas a orillas del río Sarine y está rodeada de hermosos paisajes por los Alpes suizos, lo que la convierte en un destino ideal para los amantes de la naturaleza. Es una ciudad medieval que se eleva sobre montañas. Friburgo cuenta con calles empedradas, casas de colores y una impresionante catedral gótica que domina el horizonte.

No es un destino turístico suizo de los más populares, es más bien una ciudad universitaria y destino para mucha gente extranjera que busca trabajo. Uno de los motivos para mudarse aquí es que la vivienda es un poco más barata que en otras ciudades de Suiza. El turismo se concentra más bien en ciudades como Berna (la capital), Ginebra, Zúrich, Lucerna y Lausana.
Pero aunque también pasé por Ginebra y Zurich, esta fue la ciudad que elegí para quedarme a pernoctar. Además mi próximo destino era Bregenz (Austria) y me pareció buena idea para ir acercándome.
COMO LLEGAR
AUTOBÚS, esta fue la opción que yo escogí. Me encontraba en Chambery (Francia), cuando decidí tomar un autobús de FlixBus con destino a Suiza. Pasé por Ginebra, Zurich y mi última parada fue Friburgo. El viaje tarda unas 4 horas y 15 minutos y cuesta alrededor de 20€, aunque puede variar el precio según el recorrido y la hora.
TREN: también tienes la opción de llegar en tren desde cualquier ciudad de Suiza. Para encontrar las mejores ofertas de tu billete en tren usa este enlace Trip.com.
QUE VER
Te dejo un itinerario para dos días:
Día 1:
Por la mañana toca desayunar, yo elegí «Le Point Commun» porque abre a las 08:00 y comparte edificio con la oficina de turismo de Friburgo, lo cual es genial, porque apenas acabas de desayunar, puedes pedir toda la información que necesitas para empezar tu recorrido por la ciudad. Para desayunar me pedí una tostada y un capuchino, me cobraron cerca de 15 euros (5,7 el capuchino y casi 9 la tostada). Hay que reconocer que la tostada estaba increíble.

La oficina de turismo comienza a funcionar a las 09:00 y te ofrece tres servicios GRATIS: servicio de taquillas por si tienes que dejar tu equipaje, tienen baños que puedes utilizar GRATIS (en algunas ciudades europeas he tenido que pagar) y te proporcionarán un mapa GRATIS (también he tenido que pagar por mapas en algunas oficinas de turismo de Europa). Sin embargo te lo ponen bien fácil, para que luego digan que Suiza es caro…
Me guiaron con el recorrido y seguí exactamente la ruta que me marcaron. Te mostraré cual fue.

La ruta que me propusieron fue circular, dando la vuelta al casco antiguo de Friburgo. Empezando por atravesar la Rue de Laussane, una calle del casco antiguo llena de tiendas, que te llevará directamente a la Catedral de San Nicolás.
Caminando por Rue de Laussane, me desvié un momento por unas escaleras que me llamaron mucho la atención. Se llaman Escaliers du College, si subes podrás obtener unas vistas de la ciudad con la torre de la catedral bastante cerca.


Catedral de San Nicolás, un maravilloso edificio gótico del siglo XV, que cuenta con una torre de 74 metros de altura, a la cual se puede subir, pero eso sí, ve preparado, son 365 escalones, piensa en la recompensa: una vista espectacular de la ciudad de Friburgo. Según la leyenda, el campanario no fue terminado por falta de dinero, aún así es una auténtica joya gótica.




Luego puedes visitar el Museo de Arte y de Historia. Desde hace casi 200 años se encuentra situado en pleno casco histórico (Rue de Morat). Actualmente está distribuido en tres edificios, que no podrían ser más diferentes: el noble palacio urbano de Ratzehof, un antiguo matadero y lo que en su día fue una armería. Estos edificios albergan la colección de esculturas más grande del país.
✨Si se acerca la hora de almorzar te recomiendo probar una fondue moitié-moitié en Café du Gothard (Rue du Pont-Mure 16). Es un sitio agradable, sirven comida local que está buenísima y los precios no son excesivos.
Para terminar el día te propongo una caminata por el Puente de Berna, que ofrece unas vistas espectaculares de la ciudad y el río Sarine, y disfrutar desde allí un bonito atardecer. Se trata del primer puente de la ciudad, data del siglo XVII. Es un puente de madera que está en muy buen estado de conservación. De hecho al día de hoy aún siguen pasando las personas y todo tipo de vehículos por aquí. Es el último puente de madera que pervive en esta ciudad. Se ha convertido en un gran punto de interés.




Día 2:
Al día siguiente lo ideal sería retomar el recorrido donde lo dejamos. Y desde el Puente de Berna seguir el recorrido hacia Neuveville.
El distrito de Neuveville está dividido en dos por el río Sarine, y llega hasta la zona del funicular de Friburgo. Este distrito forma parte de los distritos históricos de la ciudad. Fue creado poco después de la fundación de Friburgo, en el siglo XIII. Las industrias de la época estaban a lo largo del agua, como las curtidurías. Y fue gracias a este tipo de trabajos artesanos que el crecimiento demográfico aumentó y prosperó.
La Porte de Bourguillon, la Porte de la Maigrauge y parte de la muralla de la ciudad aún existen. Sin embargo, las puertas que conducían a la calle de la Neuveville han desaparecido.
Si sigues el recorrido por la Rue de Neuveville, llegarás al famoso Funicular de Friburgo. Se trata de una «joya de la ingeniería», incluido en el inventario de bienes culturales nacionales. Este nostálgico funicular lleva en funcionamiento desde 1899, sin gases contaminantes. ¿Quieres saber como funciona? No está impulsado con ningún motor, sino que utiliza las aguas residuales depuradas de la ciudad como energía. Si el depósito de agua está lleno, puede que sientas un olor particular al subir, pero nada que no se pueda aguantar. Yo lo noté al final, y fue muy leve. Este funicular salva un desnivel de 56,4 mt y recorre tan sólo 121 metros. Se tarda muy poquito en subir. Hace poco fue renovado y pintado en su color verde original.
Y aunque se habla de lo caro que es Suiza, en esta ocasión yo iba sola y el chico de la taquilla me dejó pasar GRATIS, así que no recuerdo el precio.


Una vez que llegas arriba, verás unas vistas MUY BONITAS de la ciudad, te dan ganas de quedarte allí por un buen rato.
AYUNTAMIENTO DE FRIBURGO, este ayuntamiento es de estilo medieval, aunque ha sufrido reiteradas modificaciones. La edificación surgida como primitiva fortaleza de los Zähringen se adaptó como sede municipal en el siglo XVI, tomando el aspecto actual en el XVII. De esta época son las originales escaleras de doble rampa.



Para acabar el día tienes dos opciones:
Puedes conocer el Jardín Botánico de la ciudad. Es un lugar maravilloso para explorar la diversidad de la flora local y mundial. Fundado en 1859, este jardín cuenta con una extensa colección de plantas alpinas, así como especies exóticas de todo el mundo.
Otra opción es visitar el Museo Gutenberg, dedicado a la historia de la imprenta y la tipografía. Y así conocer un poco más sobre la historia de Friburgo.
Tengo que agregar que esta ciudad no sólo es hermosa por sus paisajes, las gente local es muy educada y muy amable. En dos o tres ocasiones necesité ayuda o tenía dudas y siempre con muy buena predisposición me tendieron una mano. Cuando apenas llegué aún no tenía francos suizos cambiados para pagar el autobús y un señor amablemente me compró el billete. Recuerda que no se utiliza el euro y la internet del móvil no funciona en Suiza.








